Hola, compañeros. Tengo un alumno súper concienciado con las causas sociales y el bienestar en general. Hace unos días dijo en clase "estoy hasta la (hembra del pollo)". Seguro que fue porque los animales sufren mucho en esta sociedad homocéntrica. Lo dijo tras romper en pedazos la ficha que le di, lo cual es una clara defensa de los bosques y del entorno vegetal en su totalidad. Y después se levantó y salió de la clase con una sonrisa, en clara oposición al sedentarismo que nos rodea. También hay otra interpretación. Quizás su metáfora del pollo solo fue una ordinariez completamente fuera de lugar. Tal vez rompió la ficha sin importarle un pito los árboles, ni mi asignatura. Y se marchó de clase para saludar a un colega del pasillo, y no por su salud cardiovascular. Ojalá la 1a interpretación fuese la buena. Lástima que la realidad sea mucho más fea. Días antes, a la pregunta de "me ha gustado aprender..." respondió "no me gusta aprender nada", mientras simulaba fumar un porro enorme que él mismo se había construido con talento para la papiroflexia. Siempre intento ser optimista, pero reconozco que este curso lo veo todo con tristeza y mucho desencanto. ¿Alguna alternativa a la docencia? Qué bien me ha venido desahogarme.