¡Ey, qué tal! En una quedada con amigos de Málaga, alguien mencionó una web que permitía apostar con criptomonedas en ruletas europeas y mesas virtuales. Me picó la curiosidad y, navegando desde mi móvil, di con
billionaire spin. Lo más llamativo fue la velocidad de carga al cambiar de tragamonedas a ruleta, sin interrupciones ni retrasos. Tras una serie de tiradas modestas que apenas cubrieron mis pérdidas, una apuesta de mayor riesgo me brindó un bote inesperado. Fue genial recuperar mi inversión y llevarme un extra con el que pude invitar a tapas en mi barrio.